La lana merino necesita lavarse con mucha menos frecuencia que otras telas. Sus fibras naturales, por lo tanto no son un ambiente propicio para el desarrollo de bacterias.
Merino es autolimpiante y no absorbe olores desagradables. Las mantas de merino suelen ser suficientes con solo ventilarlas y que recuperen su frescura.
Lavado: se recomienda lavar suavemente a mano y enjuagar con agua tibia. Para lavar, utilice líquidos de lana de alta calidad, por ejemplo, líquido Perwool. Secar en plano y evitar fuentes de calor intenso, por ejemplo, un radiador. Recuerda, merino no requiere lavado frecuente.
Dimensiones: 85 x 100 cm (+/- 2 cm).
Composición: 100% lana merina.
Producto de la más alta calidad, hilo de origen italiano y hecho en Europa.